top of page
Foto del escritorDavid Moreno

Facebook y WhatsApp, un drama amoroso digital

El corazón no ha quedado exento del desarrollo tecnológico, la evolución del internet y sus medios de interacción. Las relaciones sentimentales son estados emocionales que desarrollamos con otra persona, pero que con la evolución humana en aspectos culturales, sociales, políticos y económicos, se han visto alteradas al igual que las formas de comunicación.

¿Cuántos de ustedes tienen publicado su estado sentimental y/o emocional en redes sociales o aplicaciones de comunicación?


Las relaciones emocionales han contribuido al desarrollo social, económico y tecnológico. Anteriormente, los matrimonios y noviazgos eran más duraderos; ahora, gracias a las transformaciones que ha traído consigo el internet, son más efímeros. Hoy contamos con una variable adicional que incrementa la poca estabilidad emocional de las personas.

Los medios de interacción digital y el mal uso dado por los cibernautas han generado separaciones emocionales, según un artículo publicado en marzo de 2013 por Cyber Psychology and Behaviour Journal, revista de investigación psicosocial en el ciberespacio, EE.UU. Ver: http://www.lavanguardia.com/redes-sociales/20130926/54388060877/redes-sociales-efectos-negativos-vida-en-pareja.html

La red social Facebook y la aplicación de multimensajería instantánea WhatsApp han causado 28 millones de rupturas de relaciones sentimentales en el mundo, situación que evidencia el poder que se le otorga a comportamientos virtuales y a posibles infidelidades en el ciberespacio. Por otro lado, la Asociación Estadounidense de Abogados Matrimoniales calculaba en el 2012 que un 20% de los divorcios producidos durante el 2011 en los Estados Unidos tenían su origen en el uso de Facebook.

Las parejas ya no se regalan flores, no se escriben cartas de amor, no se dedican canciones por medio de una emisora y ahora se cambió la espera en casa de una llamada telefónica por un icono gestual, mensaje directo o privado, correos, comentarios o un simple “Me Gusta” o “RT”.

Las redes sociales, las plataformas y las aplicaciones de comunicación fueron desarrolladas para disminuir la barrera de tiempo y la distancia. Gracias a esta evolución, en la actualidad pueden comunicarse con cualquier persona en el mundo sin importar el lugar y la hora en el que se encuentren, sólo basta con tener conexión a internet.

Sin embargo, las personas han convertido estos medios de comunicación e interacción en herramientas para causar emociones negativas y generar conflictos. ¿Hasta qué punto lo publicado en redes sociales es certero y evidencia los pensamientos y los sentimientos de los individuos?

Posiblemente son utilizadas como una vitrina, puesto que los medios sociales se prestan para construir un ideal de vida, si así lo desea el sujeto, desde la foto de perfil, nombre, estados y el tipo de contenido que comparte. En algunos casos, sólo interesa dar conocer las cualidades o habilidades, convirtiéndose en un comportamiento idealista, casi narcisista.

Un estudio que se puede observar en este sentido es el de Soraya Mehdizadeh, estudiante de Psicología en Toronto’s York University, del 16 de Agosto del 2010, donde revela que los “jóvenes encuentran en Facebook un poder del que carecen en la vida real, existiendo una correlación positiva y significativa entre el narcisismo y el contenido auto-promocional de la citada red social, especialmente en lo que se refiere a las secciones ‘foto de perfil’, ‘tus fotos’, ‘estado’ y ‘comentarios’“. Ver: http://aufop.blogspot.com/2011/12/cyberpsychology-behavior-and-social.html

No se trata de afirmar que todo aquel que usa los medios sociales digitales es narcisista o que todas las

relaciones de pareja que hacen público su estado emocional tienen predestinado terminar, pero sí es recomendable ser cuidadoso con la información que se maneja, el contenido que se publica y los tipos de contactos que se incluyen en nuestras listas. El exceso de información en redes sociales resulta perjudicial en diversos niveles.

Finalmente, no debemos olvidar que una relación amorosa es construida y manejada por dos personas, estos medios deben servir para fortalecer la comunicación, brindar detalles a la pareja conservando la intimidad y la privacidad de hechos o situaciones que sólo competen a los comprometidos en noviazgo o matrimonio. Podría resultar más viable hablar antes de stalkear, vigilar o espiar la actividad en redes sociales de su pareja, a los contactos de él o ella o iniciar una discusión porque le enviamos un mensaje y asumimos que lo leyó y no contestó al instante por falta de interés o por un tercero.

Angie Suárez

Community Manager Sisgecom

@AnSuaC

4 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page